IGC SOLICITA A LA DGGC EL ABONO DE VESTUARIO DE PAISANO PARA LOS GUARDIAS CIVILES DE INFORMACIÓN Y POLICÍA JUDICIAL.
El pasado 11 de octubre de 2024, los servicios jurídicos de IGC han iniciado los trámites administrativos para que la DGGC reconozca el derecho de los GC que realizan sus cometidos profesionales vistiendo ropa de paisano, adquirida con recursos propios, al abono de una prestación económica anual equivalente al valor de la uniformidad oficial que perciben los guardias civiles uniformados.
Dicha reclamación se ha materializado al debido a que, durante la realización de las funciones propias del Servicio de Información de la Guardia Civil, la prestación del mismo vistiendo ropa de paisano viene ordenada ya desde los orígenes de la creación de dicho Servicio, con las “Brigadillas Ferroviarias de la Guardia Civil”, más tarde denominadas “Brigadillas de RENFE”, creadas en el año 1935.
Las Brigadillas Ferroviarias de la Guardia Civil son las precursoras del actual Servicio de Información de la Guardia Civil puesto que “su finalidad era la de vigilar, SIN UNIFORME, los transportes por ferrocarril, especialmente los de mercancías a granel” según informaba la propia Guardia Civil en su documental conmemorativo del 75º aniversario del Servicio de información el pasado año 2016.
Esta situación se ha mantenido inalterada en el tiempo, de tal forma que hoy se sigue prestando dicho servicio, por parte del personal del Servicio de Información de la Guardia Civil, vistiendo ropa de paisano en aquellos cometidos que supongan la prestación del servicio en contacto con los ciudadanos; con el objeto de poder camuflar su condición de funcionarios públicos, a los efectos de la mejor obtención de la información que garantice la más eficaz prestación del servicio.
El vestuario de paisano es adquirido con los propios recursos económicos de los guardias civiles, sin que éstos perciban ninguna cuantía para su vestimenta de trabajo, a diferencia de los guardias civiles uniformados, que reciben sus prendas de trabajo a través de una dotación anual de 120 puntos canjeables por las prendas que componen la uniformidad oficial de la Guardia Civil, las cuales tienen asignado un valor de puntos variable en función de su coste.
Del importe de precio de venta al público de las prendas oficiales de Guardia Civil compradas en las tiendas policiales especializadas se puede apreciar que cada punto tiene una equivalencia pecuniaria aproximada de 2,22 euros en esos establecimientos, por lo que desde IGC se ha reclamado una indemnización anual de 266,4 euros para cada agente que realice sus cometidos profesionales vistiendo de paisano en estas unidades.