En Agosto de 2020, desde Independientes de la Guardia Civil (IGC), dimos a conocer unos hechos que podrían formar parte de una película americana: “Ciudadano británico irrumpe violentamente en una dependencia policial agrediendo a dos Agentes, para días después asesinar a su compañera y finalmente suicidarse estrellando su vehículo a gran velocidad contra un camión”.
Esta agresión se saldó con varias piezas dentales rotas y con un agente que tuvo que desembolsar de su bolsillo la reparación de las mismas y posteriormente verse en instancias y reclamaciones para que le devolvieran el dinero. Ayer mismo, resaltábamos que había conseguido junto al Servicio Jurídico de IGC, el abono de los gastos completos.
Pues bien, situación similar ha vuelto a suceder nuevamente en las dependencias del municipio gaditano de Barbate. Y es que el pasado día 21 de este mes a un energúmeno, no encontramos mejor calificativo, no se le ocurre otra cosa que atacar a un Sargento de la Guardia Civil perteneciente a este Puesto, utilizando una pulsera telemática rota por él mismo, en plena calle y en presencia de los viandantes. Añadir que esta persona actuó de manera tan ruin, que atacó al Sargento por la espalda, con tanta brutalidad y alevosía, que le abrió la cabeza, teniendo que acudir a los servicios médicos para llevarse “dos regalos navideños”: seis grapas de sutura y una fuerte contusión que le provoca dolores de consideración.
Volvemos a denunciar la falta de personal. Volvemos a insistir que no es lógico que un Puesto Principal como el de Barbate, cuya problemática es conocida, con un índice delincuencial tan elevado, tenga un déficit de agentes tan alto, ya que hay unos 20 componentes que se encuentran ocupando otros puestos de trabajo fuera de este Acuartelamiento, no teniendo la opción a solicitar sustitución por los mismos.
Lo ocurrido estos días atrás, se convirtió además en una jornada de puertas abiertas para todo aquel que le apeteció increpar y añadir más fuego a la agresión, ya que este Acuartelamiento se ubica próximo a una de las barriadas más conflictivas de Barbate, donde varios vecinos se hicieron notar.
Con pocos Agentes, desprotegidos a todos los niveles y con vecinos “subidos” contra ellos por la falta de autoridad de la que las FFCCS gozan en la actualidad, la mezcla es explosiva y el resultado obvio. Y a la vista está tras estos hechos.
Ante todo, pronta recuperación a este Sargento de la Guardia Civil por su gran oficio, arrojo y saber estar.
Desde Independientes de la Guardia Civil (IGC), no podemos hacer más que continuar en nuestra reclamación de más personal y más autoridad.